jueves, 22 de octubre de 2015

Letanía de mi ser


Deseo,
rojo deseo de tu nombre,
en el susurro
de un aliento
que aún no olvido.

Deseo,
alquimia de mi cuerpo
ante la 
belleza de un espejo.

Y
en la distante medianoche
el resplandor
de tu voz
me recorre
como una melodía inaudible,
aquella que tú me enseñaste 
en la distancia inexistente.

Fui
bella por ti,
tan frágil,
tan fuerte y ardiente.
Tan transparente
en mis opacidades...

y
aún así
nunca antes más yo...
nunca antes ni después
fui  tan yo...
 Simplemente yo..

Deseo,
rojo deseo de tu nombre,
en el susurro
de un aliento
que aún no olvido.

3 comentarios:

  1. :)

    Que alegría volver a leerte.
    Y además con todo un poemazo.

    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Torito !!! es que vos sos un toro bueno !! besos.

      Eliminar
  2. Hola, Beatriz. Mi agradecimiento por tu presencia en el blog FUGACIDADES, antes y después de la partida de Ían Welden. Él era feliz con los comentarios y aportes que recibía. MUCHAS GRACIAS. Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar

Has entrado en La Caja, cuéntame lo que encontraste, déjame tu huella, quedará guardada.

En el Aire

¡Calla! Calla el silencio de rojo estrepitoso Calla como calla la estampida en la nube que por marte se pasea Calla a...