Estoy enmudecida. Una vorágine de sensaciones se mezclan de tal forma que es imposible darles forma. Estoy latente, entre el horror de la muerte de una pequeña de once años, asesinada brutalmente en un municipio muy cercano al mío. Estoy tan sacudida que no tengo ganas de escribir y en general tampoco de comentar, (no es justo que entre a dejar una huella si no estoy con algunas luces como para leerlos con lo que cada uno de ustedes se merecen).
La muerte de Candela y todas las sucias circunstancias que rodean al caso me ha pegado en el centro del alma.
No digo que no escribiré más, tal vez, mañana mismo esté escribiendo nuevamente, pero hoy, sólo tengo una tristeza infinita.
Les dejo un abrazo a cada uno de ustedes y me siento mal por no entrar en sus rincones de luz, pero ya volveré lo antes posible.
Que estés en el lugar mas hermoso del Universo..y que seas feliz como aquí no te dejaron...
ResponderEliminarAdiós Candela..alguien seguirá tus sueños de ángel y tendremos tu memoria latente.
Que tragedia!!!
ResponderEliminarÁnimo.
Besos.
me siento igual, estoy asqueada...
ResponderEliminarUn abrazo nena!
Querida Beatriz: creo que todos nos sentimos igual. Duele no saber que fue lo que sucedió. Si hay culpabes ocultos en su propia familia o qué?
ResponderEliminarEn conclusiones: Candela ya no está, otra víctima inocente de la maldad humana.
mariarosa
Candela, viene del latín vela, candela, la que ilumina...¿No es acaso una señal?, ella se ha ido, pero quedará su luz por siempre en nuestra consciencia. Hasta siempre pequeña.
ResponderEliminarUn beso.
Te siento como te sientes... me siento como tu te sientes....
ResponderEliminarbeso
Como nos sentimos todos lamentablemente. Yo también hice un post titulado Sin palabras, y no las tiene porque así nos dejó todo esto. La maldad humana, alguien lo ha dicho mas arriba, quien puede asesinar ata n hermosa criatura y creerse humano..
ResponderEliminarTe entendemos, querida ¡no sabes cuánto! El estupor, la rabia, la incertidumbre... todo es un asqueante mar que nos golpea ¡son nuestros niños y nuestros jóvenes! ¡Adónde iremos a parar si no detienen a esos animales a quienes no importa quién es la víctima! No puede ser, no puede ser.
ResponderEliminarAbrazo.