Tuve que arrancarte los ojos.
Luego,
te corté la lengua ...
y
esas cuerdas vocales...
Tuve que amputarte las palabras,
-incluso la sombra que dabas en los muros-
Y
fui yo quien puso en tus manos
la filosa daga,
para que tú mismo lo hicieras...
Frente a mis ojos...
frente a mi corazón
mientras veía como te desangrabas
en mi interior...
Convirtiéndote
en una invisibilidad salvadora
y en la permanente certeza de tu ausencia.
Punzante... dolorosa.
Tuve que arrancarte los ojos...
pero están embrujados
y
me siguen mirando.
Poema escrito con fecha 9 de noviembre de 2012
Excelente pema con un terrible final imprevisto. Tú sabes muy bién escribir buena y poesía.
ResponderEliminarAbrazos chilenos desde copenhague congelada,
Ian.
Gracias querido Ian!! un abrazo compartiendo el verano de Buenos Aires...
EliminarTe gustan esos ojos que te mirarán siempre.
ResponderEliminarBesos.
me gusta tu estilo dramaticamente bello
ResponderEliminarQué desenlace, sigue vigente el sentimiento a pesar de los esfuerzos por desterrarlo...
ResponderEliminarUn beso
Hay miradas que persiguen, aunque las arranques de los ojos. Sorprendente y bello poema. Saludos Bea
ResponderEliminarEs que no es tan fácil olvidar, mi niña...
ResponderEliminarUn abrazo enorme.
Hay miradas que no se borran así nomás, incluso hay dagas que mas allá del filo, no cortan lo necesario.
ResponderEliminarPoemón!!!
Besos Su!!
Hoy es 1 de febrero, y al entrar veo el comentario de Ian y no puedo creer que ya no estè con nosotros fisicamente...se me llenan los ojos de làgrimas....no lo puedo creer...hace tan solo unos dias......uffffffff...
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