Como una llovizna
de esquirlas
las palabras sangraron mi alma.
Cómo el susurro
de lo inimaginable
supe de ti,
de tu cuerpo que hoy
dice sus lamentos
mientras ellos se vuelven
dolor
en los ojos tiernos y bellos
de tu madre.
Y
mi pecho se convierte
en un altar
si es que eso es posible.
En él
mi alma se hinca
rezando una oración de amor
para una dulce muchacha...
Y
para una gran mujer
cuyas entrañas desgarradas apuñalan lágrimas,
asesinando en ellas,
los miedos jamás igualados
-inimaginables-
Sol de otro sol
Luz de otra luz
en estrecha unión.
Hoy mi ser
las abraza con alas invisibles.
No se si sirve...
Pero allí estoy.
Que la luz de Luz siga brillando.
Que la daga tremenda
no se acerque siquiera
a ninguna de las dos.
Luz, fuerza y esperanza para mi querida Graciela.
Un bello poema a la madre, muy sensible y lírico.
ResponderEliminarNo la conozco pero me has conmovido.
ResponderEliminarMe uno a tu oración.
Besos.
Hermoso poema , Luz fuerza y esperanza para tu amiga y también para el mundo.
ResponderEliminarBesos y mil gracias por tu huella amiga.
Poema hecho oración, que invita a secundarte , me uno a tus hermosos sentimientos y repito tu oración.
ResponderEliminarcomparto los dentimientos de tu noble corazón
Un beso.
Me uno a tu oración.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte!
Me uno a ti amiga..que dolor..que impotencia..oremos por ella..y seguro que algo se hará..quizás pueda viajar..ufff.
ResponderEliminarTu poema un canto al vida..ojalá sea vida..amiga..
Un beso desde mi orilla
Gracias a Todos amigos míos!!! Un abrazo!!
ResponderEliminarcuantas veces la luz se hace milagro en las palabras que suenan a plegaria. Invoquemos entonces a la luz de la vida para disipar esos miedos. Un abrazo fuerte
ResponderEliminarSusana querida, Acabo de leer tu poema luminoso para LUZ.
ResponderEliminarEl Arte , en todas sus formas, incluido el de vivir, han de tener que ver con eso, con echar luz sobre la realidad, por muy cruda que esta se nos presente.